miércoles, 2 de marzo de 2011

Recuerdos y actualizaciones II

Nunca fui una persona muy sociable, soy más de andar siempre en la mía y es difícil que alguien me caiga bien. Creo que debe ser porque no soy de esas personas que hablan siempre sobre tonteras al estilo fiestas, bebidas, novios, novias, chicos y chicas. Sé que suena a que soy típico elitista, pero no es para nada de esa forma... simplemente no tengo esos intereses y nunca quise fingir tenerlos. Es así que muchas veces en juntadas con amigos y/o salidas, me van a ver con una cara seria el 90% del tiempo, es así que muy pocas personas se me acercan.

Sin embargo no voy a negar que nunca tuve la necesidad de compañía, de alguien que me ayude, que esté ahí en las buenas y en las malas. Por suerte esa persona apareció el año pasado, es una chica que se llama Verene (rarito el nombre, pero bueno, es lo que hay jaja), fuimos compañeros desde jardín de 3 hasta 5° grado de primaria. No recuerdo mucho de ese tiempo, más que juegos de típicos chicos pequeños. Luego fue que me cambié de colegio y perdí contacto con ella, hasta que gracias al magia del facebook hace 2 años que la encontré y desde ese entonces empezamos a chatear, a juntarnos progresivamente, a salir. Hasta que este año, de 365 días debemos haber chateado por lo menos 300. Fue tan genial conocernos nuevamente, poder hablar sobre más cosas que las boludeces típicas de todo adolescente, sentir que alguien estaba ahí siempre para mí, y sentirme útil para ella también. En fin, hoy en día ella se fue a Córdoba y el día de su partida lloré, sí lo admito, lloré, no soy de llorar por nada practicamente; pero esto me dolió en el alma, separarme de ella; por eso estuve triste días y días, y hasta aún hoy sigo sintiendo el dolor de no poder tenerla al lado, de no poder juntarnos en su casa, de ir a su pileta, de que venga al centro, de esas charlas eternas. Sin embargo sé que nuestra amistad va a perdurar a pesar de la distancia, soy optimista en ese sentido. ¡Y me siento realmente feliz de poder ir a verla este viernes! Quizás ahora que miles de kilómetros nos separan, nuestros encuentros y juntadas sean mucho mejor jaja.

En fin, no sólo fue hermosa las experiencias vividas con ella, sino también debo agradecerle haber hecho de mí una persona mucho más abierta con los demás, más cordial, más disupuesto a vivir cosas diferentes y un largo etcétera. Es por ello que pude conocer gente, quizás no todos sean mis mejores amigos, es más ni siquiera amigos, pero sin embargo, muchas veces me siento acompañado así como muchas veces también pasó grandes tardes y/o noches a la vela de su compañía, de sus chistes, de sus anécdotas. Es por estas cosas que recuerdo al 2010 como uno de mis mejores años, un año en que cambié, un año en que no me sentí sólo, un año en el que viví muchas cosas diferentes y todo esto se lo debo a ella, gracias Verene.

1 comentario:

  1. Te entiendo porque a mi me pasaba, de no poder abrirme tanto a la gente. Tal vez la diferencia es que nunca me senti sola porque siempre tuve amigas bastante cercanas con las cuales compartir. como sea, no sabia que lo de cordoba era por eso! mucha suerte alla para vos entonces.
    un abrazo querido!

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